El tema de los planes y las estrategias empresariales para aumentar las ventas suele conducir a una diferenciación excluyente entre el inbound marketing y los modelos de publicidad característicos de los medios informativos tradicionales: anuncios en prensa, radio, televisión, volantes, mantas…
Esos modelos tradicionales de publicidad, sin embargo, siguen tan vigentes y son tan utilizados en la era digital como ocurría antes de internet. Banners que ocupan un cuarto de pantalla; anuncios encima, debajo y a los lados del texto que estamos leyendo; spots antepuestos al video que queremos ver; pop ups (casi siempre) inoportunas…
Nadie escapa a la publicidad atravesada por dondequiera que se navegue en internet; pero no se le puede negar la importancia que tiene dentro de un plan de mercadeo en el que se quieren obtener ventas inmediatas (aunque a muchos –quizás a la mayoría- de los receptores) les resulte una molestia.
Tácticas y estrategias
Esos tradicionales métodos de promoción de ventas son los que se conocen en la jerga cibernética como “marketing digital” o “outbound marketing”. Y no se crea; tiene puntos a favor, por la rapidez con que genera una respuesta.
A manera de definición, el marketing digital es un conjunto de tácticas que abarca los recursos de los banners, el correo electrónico, los folletos digitales y el desarrollo de sitios web, mientras que al inbound marketing se le considera una “filosofía”.
El inbound marketing no busca al cliente ni invade su territorio. Ofrece a un segmento del público, interesado en el producto, una experiencia dinámica y educativa, mediante contenidos de valor. En términos más simples, le ofrece al interesado toda la información que necesite, acerca del producto que esté buscando.
¿Entonces, el marketing digital es inútil?
No exactamente. El marketing digital tiene a su disposición muchos medios para llegar a una audiencia masiva, donde puede encontrar una respuesta favorable e inmediata. El inconveniente es que llega al público indiscriminadamente y los resultados que se obtienen mediante una campaña publicitaria son imprecisos.
El mayor inconveniente del outbound marketing proviene de la utilización de técnicas agresivas y repetitivas, que llegan a usuarios que no tienen ningún interés en el producto o a potenciales clientes que sí tienen interés en el producto, pero que en ese momento están ocupados en otra cosa.
En el sentido positivo, el inbound marketing se alimenta de aspectos del marketing digital para convertirlos en contenidos que captan la atención de los potenciales clientes en las primeras etapas de su compra. Les ayuda a través de información educativa, novedosa.
¿Cómo atraigo a los clientes?
Con el inbound marketing, ellos llegan solos; sólo hay que mostrarles el camino. En principio, un cliente potencial es alguien que necesita el producto que la empresa está vendiendo. El cliente solicita información por internet, y encuentra una lista de opciones, para que escoja.
Una etapa del inbound marketing consiste en la elaboración de contenidos de calidad que interesen al cliente potencial. Se les suministra la información que necesitan, se les ayuda y se les acompaña, hasta que estén convencidos de que el producto que se les ofrece es el que les depara mayores ventajas.
O sea: ¡hable del producto que su cliente está buscando para que puedan encontrarse en línea!
Esta relación personalizada con el usuario permite a la empresa crear una base de datos (nombre, ubicación, dirección de correo electrónico, preferencias, etc.) para estarle informando al cliente acerca de nuevos productos de su interés. El inbound marketing no solo sirve para atraer a los clientes; también para fidelizarlos.
¿Inbound o outbound?
Ambos. Inbound encierra un concepto total de procedimientos y estrategias que tiene el objetivo de atraer más visitantes, identificar a los clientes potenciales, convertir más oportunidades de venta, cerrar más negocios, fidelizar a los clientes.
También es un procedimiento que permite obtener estadísticas para analizar cada una de las etapas del inbound marketing y crear una base de datos acerca de cada uno de los clientes efectivos y potenciales, para darles seguimiento y para tomar decisiones relacionadas con el marketing.
Pero el marketing digital también es un instrumento que sirve para reforzar al inbound marketing, porque alerta a los usuarios interesados sobre asuntos que podrían ser de su interés. Si este es el caso, bastará con un simple clic sobre una imagen, un botón o una palabra de enlace, para desplazarse hasta el contenido donde confluyen los intereses del consumidor y de la empresa.
Conversemos y definamos juntos la estrategia de inbound marketing de su organización.