El recurso del correo corporativo es un indicador de prestigio, porque fortalece la imagen corporativa, brinda seguridad y velocidad, permite sincronizar el correo entre varios dispositivos, facilita el manejo organizado de contactos y eventos, entre otros.
Con tantas características ventajosas, el correo electrónico parece convertirse en un instrumento ideal para el desarrollo campañas de mercadeo. Pero ese no es un concepto del todo efectivo, cuando se le trata de utilizar para el envío de correos electrónicos masivos.
Al usarlo para campañas de correo masivo, hay que tener cuidado y hacerlo bien, para evitar la generación de resultados adversos. Partamos de que los correos no solicitados pueden ser rechazados por los destinatarios, con la consecuencia de que su dominio puede caer en una lista negra (blacklist) y todas las cuentas de su empresa pueden ser suspendidas temporalmente.
De ser así, todos los demás servidores de correo electrónico sospecharán que los envíos desde su dominio son spam y, lo que es más grave, el IP del servidor de la empresa también caerá en la “blacklist”.
El alcance es limitado
A los inconvenientes relacionados con una eventual penalización, en respuesta a los correos declarados como spam, hay que agregar que el correo corporativo sólo permite el envío de cantidades limitadas de correo por día, con límites que van de los 200 correos por hora a los 1,000 correos por día, en promedio.
Estas limitaciones para correos corporativos y plataformas como Gmail, Yahoo o Hotmail, deben entenderse, en gran medida, como barreras de protección a los usuarios y la correspondiente limitación a la información que ellos reciben.
Ciertamente, permiten las prácticas de e-mail marketing, en la medida en que se cumplan los reglamentos; pero las condiciones establecidas para el correo corporativo pueden ser limitantes para un mejor aprovechamiento del enorme potencial que ofrece internet.
Para sacar mayor provecho al marketing digital, lo recomendable es acudir a plataformas profesionales, diseñadas para enviar miles o millones de correos. Por su índole especializada, se aseguran que los correos enviados sean bien recibidos, con estricto apego a los derechos de los destinatarios.
Hay decenas de plataformas, algunas gratuitas y otras (de la índole de Mailchimp, Constant Contact, Mailerlite, GetResponse, MailRelay, etc.), de pago gradual, ajustado a las necesidades y posibilidades de una empresa.
Veamos lo que ofrecen algunas de ellas:
MailChimp:
Mailchimp es una herramienta diseñada para cubrir diversos aspectos del marketing por correo electrónico. Permite el uso de plantillas prediseñadas, diseñar nuevas plantillas, crear campañas y boletines, gestionar listas de clientes, analizar los datos y reportes de los e-mails, etc.
Esta plataforma, que cuenta con 7 millones de usuarios, permite automatizar un contacto efectivo y de calidad con suscriptores, clientes potenciales y efectivos, con el fin de vender más, fomentar la fidelidad de los clientes y posicionarse en el mercado.
Su cuenta gratuita permite enviar hasta 12 mil envíos al mes, para un máximo de 2 mil suscriptores, además que permite la integración con otras aplicaciones, como Twitter, Google Analytics, Google Docs e IStockPhoto.
Constant Contact:
Es una poderosa herramienta de e-marketing creada para ayudar a las empresas a crear y administrar fácilmente comunicaciones por correo, eventos y encuestas electrónicas.
Sirve para desarrollar campañas de e-mail, enviar boletines de noticias, realizar encuestas en línea, promocionar eventos, hacer pagos en línea. También cuenta con un CRM (generador y administrador de cartera de base de datos de clientes).
Como otras herramientas de e-mail marketing, Constant Contact ofrece plantillas profesionales para que sus clientes las personalicen con sus logos, textos, colores e imágenes.
Y, como especializada que es, la plataforma cuenta con herramientas de análisis de contenidos, para que los correos lleguen al destinatario con una mínima posibilidad de caer en un filtro de spam.
MailerLite:
Es un editor sencillo y fácil de manejar, creado para realizar gestiones y generar estadísticas sobre suscriptores e informaciones relacionadas con una campaña de e-mail marketing. La suscripción es gratuita y cuando la cantidad de suscriptores supere los mil, se accede a planes de pago. Tiene planes bastante económicos y es una gran opción por la relación funcionalidades/precio.
Como parte de los términos de servicio y política anti-spam, MailerLite establece como condición que la empresa contratante cuente con el permiso de sus suscriptores para enviarles contenidos de campañas publicitarias.
Al usar estas herramientas, además, es importante que vaya «calentando la IP», o sea, no empezar con un envío a una gigantesca lista de correo que no está depurada y que muchos mensajes van a «rebotar», sino que ir agregando poco a poco destinatarios que sabemos existen, de modo que el porcentaje de entrega sea lo más cercano al 100% posible, lo que irá mejorando nuestra reputación y hará que los receptores (Gmail, Yahoo, Outlook y cuentas corporativas) nos perciban como un correo válido y no como un «spammer» más.
Así las cosas y, para resumirlo lo más posible: evite enviar correos masivos directo desde su correo y utilice, en su lugar, herramientas que fueron hechas para tal fin.
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