Como todos los bienes patrimoniales, una cuenta de Facebook también tiene un destino, cuando el titular fallece: Puede mantenerse vigente (si Facebook no se da por enterado del fallecimiento); puede eliminarse de forma permanente o, bien, puede convertirse en una cuenta conmemorativa.
Para prevenir y evitar el uso indebido de la cuenta, en su ausencia, el usuario puede designar a un contacto de legado para que decida, ante Facebook, si la elimina de forma permanente o si decide convertirla en una cuenta conmemorativa.
La cuenta conmemorativa tiene la particularidad de convertirse en un lugar de encuentro de familiares y amigos del fallecido, para ver los contenidos y reflexionar sobre su legado, pero no permite iniciar sesión, de no ser que cuente con una autorización expresa para actuar como administrador.
Las cuentas conmemorativas tienen características que las diferencian de las cuentas activas:
- En el perfil, junto al nombre de la persona, aparece el concepto “En memoria”.
- Nadie puede iniciar sesión en una cuenta conmemorativa.
- Las cuentas que no tengan un contacto de legado no se pueden cambiar.
- Los perfiles conmemorativos no aparecen en espacios públicos, como las sugerencias de «Personas que quizá conozcas», los recordatorios de cumpleaños o los anuncios.
- Según la configuración de privacidad de la cuenta, los amigos pueden compartir recuerdos en la biografía conmemorativa.
- El contenido que haya compartido la persona (por ejemplo, fotos, publicaciones, etc.) permanece en Facebook y está visible para el público con el que se compartió.
- Las páginas con un único administrador cuya cuenta se convirtió en conmemorativa se eliminarán de Facebook si el administrador formula una solicitud válida.
Facebook también admite la posibilidad de que cualquier usuario decida si elimina su cuenta, tras su fallecimiento. Para lograrlo, sólo hay que ir a Configuración de la cuenta>General>Administrar cuenta y seguir las instrucciones.
La eliminación de la cuenta de un familiar fallecido es algo más compleja, porque el solicitante debe demostrar que tiene un interés legítimo, así como la confirmación del fallecimiento. Hay que aportar, por ejemplo:
- Una copia escaneada o foto del acta de defunción del ser querido.
- Si no se tiene el acta de defunción, se debe proporcionar una prueba de autoridad legal y un comprobante de que la persona falleció (poder notarial, certificado de nacimiento, última voluntad y testamento, la sucesión testamentaria).
Como se puede apreciar, la cuenta de un fallecido se puede eliminar siguiendo las instrucciones de Facebook, pero siempre va a ser mejor convertirla en una cuenta conmemorativa, para poderla estar visitando y traer a la memoria los gratos recuerdos. A fin de cuentas, todos queremos que nos recuerden.
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